
Charlton Heston. Un héroe para la eternidad
Cuando era niño mi padre me llevaba al cine, la mayoría de las veces, tres o cuatro veces a la semana. En el camino de vuelta a casa le solía preguntar: «Papá, ¿qué te ha parecido la película que acabamos de ver?». Casi siempre me contestaba: «No ha estado mal»